Entenderemos por parásitos internos
aquellos que viven en el interior de las palomas, en su sistema
digestivo principalmente. Como en el resto de los seres vivos estos
parásitos debilitan al animal, aprovechando los momentos en que las
defensas estén más bajas para reproducirse y debilitarlo aún más. Por
ello todos los años se deberían desparasitar a las aves.
Ascárides y capilaris están muy extendidas en los palomares, parasitando el intestino delgado de las palomas.
El gusano capilar (capillaria obsignata); es un parásito
muy filo de aspécto capilar que ataca también a otras aves, además de
las palomas. Los huevos de capilaria en el exterior tienen capacidad
infecciosa después de 8-9 días; son filiformes, miden en el caso del
macho 9-12 mm., y la hembra 12-16 y los huevos; 46-54 por 25-28 um. Son
de color amarillo oscuro. Se encuentran fundamentalmente en el intestino
grueso.
El gusano intestinal de las palomas (Ascaridia columbae),
sólo afecta a las palomas, y sus huevos tienen capacidad infecciosa
durante 2-3 semanas aún en el exterior; son gusanos redondos, que miden
en el caso del macho de 2 a 4 cm por 1 mm y la hembra de 2.5 a 5cm por
1.5 mm; y los huevos 70-90 por 40-50 um. Se encuentran fundamentalmente
en el intestino delgado.
Hay al menos dos tipos de solitarias que atacan a las palomas;
Hymenolepis Columbae y Raillietina Columbae. Su presencia está unida a
huéspedes intermediarios adecuados como puedan ser escarabajos u
hormigas, que le son necesarios para su desarrollo. Sólamente la
ingestión de un huésped intermediario es suficiente para infectarse. 
El tiempo que pasa desde
la ingestión de los huevos con capacidad infecciosa hasta la madurez de
la nueva generación de vermes y la primera expulsión de huevos a través
de los excrementos es de 5 a 6 semanas en los ascárides y 3 a 4 semanas
para las capilarias y aproximadamente 2 semanas para las solitarias.
Los síntomas que presentas las palomas infectadas al cabo de 10 o 12 días suelen ser deyecciones de distinta consistencia, disminución del apetito a medida que la infección avanza, adelgazamiento progresivo del ave y en los casos más avanzados, modificación del comportamiento; apatía, abatimimiento o plumaje erizado.
La infección por parásitos internos se puede diagnosticar mediante examen microscópico de las deyecciones de los animales infectados, para diferenciarlas de otras enfermedades de diagnóstico similar como puede ser la salmonelosis, coccidiosis o la infección por e-coli.
Los síntomas que presentas las palomas infectadas al cabo de 10 o 12 días suelen ser deyecciones de distinta consistencia, disminución del apetito a medida que la infección avanza, adelgazamiento progresivo del ave y en los casos más avanzados, modificación del comportamiento; apatía, abatimimiento o plumaje erizado.
La infección por parásitos internos se puede diagnosticar mediante examen microscópico de las deyecciones de los animales infectados, para diferenciarlas de otras enfermedades de diagnóstico similar como puede ser la salmonelosis, coccidiosis o la infección por e-coli.
Existen numerosos productos en el mercado para el tratamiento de
estas infecciones, aunque en cualquier caso no se recomienda su uso
durante la época de muda de las plumas o mientras las parejas estén
cebando pichones.
Con todo, la mejor medida es la prevención que irá encaminada hacia el manejo y la medicación:
Con todo, la mejor medida es la prevención que irá encaminada hacia el manejo y la medicación:
- Limpiar periodicamente los residuos producto de sus deyecciones, manteniendo seco el palomar.
- Utilizar periódicamente como elementos de limpieza para garantizar una mayor cobertura contra los parásitos, el agua hirviente y productos desisfectantes específicos.
- Utilizar comedores que impidan en la medida de lo posible que los granos contacten con el suelo y sean después ingeridos por los palomos junto con huevos de parásitos.
- Cuando se proceda a la desparasitación debe tratarse a la totalidad del palomar.
- Se deben tomar precauciones con los palomos de nueva adquisición, controlando su estado sanitario y procediendo si se requieren a una desparasitación adecuada.
- Controlar aquellos palomos que salen a concursar.
- Por último, desparasitar periódicamente en función de las necesidades propias de cada palomar.
